11 diciembre 2005


“Happy Trails” (Capitol). Quicksilver Messenger Service edita en 1969 su segundo disco de larga duración con el título “Happy trails”, una muestra de lo que se denomina rock ácido practicado por muchos grupos del área de San Francisco en la segunda mitad de la década de los sesenta. Liderado por el excelente guitarrista John Cipollina, el cuarteto ofrece una larga reinterpretación de “Who do you love” , de Bo Diddley, extraída de una actuación en directo en el Fillmore. 
El disco se completa con otras piezas, en una de ellas vuelve a aparecer la marca de Bo Diddley (Ellis McDaniels), en concreto “Mona”, donde los duelos de guitarras entre Cipollina y Duncan son la nota destacada, como pasa con otras composiciones, “Maiden cancer moon” y “Happy trails”, en las que también tiene un especial protagonismo la sección de ritmo compuesta por David Freiberg (más adelante miembro de Jefferson Airplane) y Greg Elmore.
El LP constituye sin duda uno de los más valorados dentro del ámbito del rock por la crítica y el público. En cuanto a la portada de George Hunter y el colectivo Globe Propaganda, capta una imagen que parece la típica postal costumbrista relacionada con la épica del Oeste americano. Quicksilver seguiría una desigual carrera discográfica e incluso en 1975 hubo una reunión de los miembros fundadores del grupo que grabaron el LP titulado “Solid silver”. Éste no tuvo mucha aceptación por parte del público, salvo para los seguidores de la banda californiana, por lo que los integrantes de Quicksilver decidieron disgregarse.
El disco "Happy trails" lo conseguí en el Rastro madrileño donde se vendían vinilos de importación. Esto ocurría a comienzos de los ochenta, cuando otras "movidas" musicales reivindicaban las canciones de no más de tres minutos. "Who do you love" de Quicksilver fue mi canción de cabecera durante una larga temporada, como le ocurriría a mi amigo Candi, a quien a menudo le prestaba el disco, hoy desgastado por el uso, pero presente entre los preferidos de mi colección.

Canciones: “Who do you love. Part 1”, “When you love”, “Where you love”, “How you love”, “Which do you love”, “Who do you love. Part 2”, “Mona”, “Maiden of the cancer moon”, “Calvary” y “Happy trails”.

Músicos: John Cipollina (guitarra y voces), Greg Elmore (batería, percusión y voces), David Freiberg (bajo) y Gary Duncan (guitarra y voces).

Otras portadas: Shady Grove (1969), What About one (1970), Quicksilver (1971) y Peace by piece (1986).
 "Every good boy deserves favour" (Threshold). The Moody Blues sorprendió a comienzos de la segunda mitad de la década de los sesenta con la canción “Noches de blanco satén”, lo cual parecía que iba a condenar al grupo a llevar el lastre de banda de un éxito que quitaría protagonismo al resto de sus grabaciones, como pasó con tantas formaciones británicas de su tiempo. Originario de Birmingham, el nombre del grupo contribuía al principio a responder a interrogantes sobre el estilo de música que practicaban sus componentes. Tras el periodo inicial de búsqueda, The Moody Blues contó con un estilo propio en el que se mezclaban la comercialidad y la experimentación. El quinteto supo combinar las canciones pegadizas con otras más difíciles de escuchar para quienes seguían la música pop, una mezcla, que por otra parte, funcionaba en cada disco que iba editando el grupo, es decir siempre había una canción o dos que sobresalían sobre el total. “Every good boy deserves favour” ofrece asimismo otra de las facetas del grupo, las cuidadas portadas de discos. En este caso, la obra plástica de la carátula corresponde a Phil Traves, otras se concretaron incluso en cuadros de conocidos artistas. Como siempre las composiciones de Lodge, Edge y Hayward predominan sobre las otros miembros del combo, quienes se adelantaron al rock sinfónico pero sin caer en los excesos de este estilo, pues The Moody Blues suena más a pop que a grupo de los incluidos en el denominado rock progresivo. En los sesenta The Moody Blues era mi grupo favorito de las Islas Británicas; estaba más al tanto de sus discos que, por ejemplo, los de The Beatles, Rolling Stones, The Kinks, Them, Taste, Ten Years After, Sof Machine o King Crimson, entre otros muchos. Con el tiempo, mi interés por la banda de las “noches de blanco satén” fue decayendo, en parte por la aparición de otros estilos en teoría más actuales. Sin embargo, los estribillos de algunas de sus canciones todavía permanecen en mi mente, como “Emily’ s song”, pieza que siempre me recuerda a mi compañera de universidad María Emilia Sánchez.

Canciones: “Procesión”, “The store in your eyes”, “Our guessing game”, “Emily’ song”, “After you came”, “One more time t olive”, “Nice to be here”, “You can never go home” y “My song”.

Músicos: Justin Hayward (guitarra y vocal), John Lodge (bajo y vocal), Ray Thomas (flauta y armónica), Mike Pinder (teclados) y Graeme Edge (batería y percusión).

Otras portadas: The Madnificent Moodies (1965), Days of the futured pased (1967), To our children’ s children’ s children (1969), Seventh sejour (1972), Long distance voyager (1981) y Sur la mer (1988).

05 diciembre 2005

“Wat’ s goin on” (Tamla Motown). Marvin Gaye (1939-1984). Cambio de dirección musical de uno de los cantantes triunfadores del sello Tamla Motown, Marvin Gaye. De imagen seductora, pero atormentado por los fantasmas propios de una estrella del pop, Marvin deja atrás las canciones destinadas a ocupar los primeros puestos de las listas de grandes éxitos, también rechaza a comienzos de la década de los setenta los afortunados dúos con damas de excelente voz del sello de Detroit, para mostrarse más preocupado por asuntos terrenales como la naturaleza degradada, la violencia, la guerra, entre otros problemas que estaban presentes en la vida cotidiana y caían con más fuerza sobre los desfavorecidos, sobre todo, en los guettos de las grandes urbes norteamericanas. Sin embargo, el mensaje de Gaye se hace más universal y llega con fuerza a las emisoras que no paran de poner canciones como la que da título al disco u otras: “Mercy Merccy Me (The Ecoloogy)”, Inner city blues (Make me wanna holler” o “”Save the children”. La música en la que abunda instrumentación de cuerda y viento ofrece a Marvin Gaye una nueva forma de expresión en la que no se mantendría demasiado tiempo, pues su personalidad no era la del tipo de músico alertagado, como desmostraría hasta el final de sus días. Gaye aparece con barba, imagen que la aleja de la de sustituto del también sexy y malogrado Sam Cooke. Sobre Marvin, ataviado con un largo chaquetón brillante e impermeable, cae agua nieve, que resbala por su oscuro y cabello crespo, mientras su mirada meláncolica se pierde quizá en un horizonte nada halagüeño. El cantante vuelve a vivir un segundo periodo de esplendor artístico, como demostraría en sus siguientes “Trouble man” y “Let’ s get it on”. Entonces la afiliación a las causas olvidadas quedó sustituída por el canto al sexo y a un sistema de vida más lúdico mediante composiciones que llenaron las pistas de baile. Aunque posterior, “Let’ s going on” fue uno de mis sencillos favoritos en 1973, y fue tal su influencia que al poco tiempo adquiría un álbum con tres larga duración, una antología de Marvin Gaye, en el que al final estaba buena parte de “Wat´s goin on”, todo un descubrimiento, que a partir de aquellos días de los setenta se convertiría en mi disco favorito de música de la Tamla Motown.

Canciones: “What’ s going on”, “What? S happening brother”, “Flyn’ high (In the friendy sky)”, “Save the cildren”, “God is love”, “Merrcy Mercy me (The Ecology)”, “Right on”, “Wholy Holy” y “Inner city blues (Make me wanna holler”.

Músicos: arreglos y orquesta dirigidos por David Van DePitte. The Andants, Mel Farr, Bobby Rodgers, Elgle Stover y Lem Barney (voces). Ceet Foorest (batería). Jose Messina y Robert White (guitarras). James Jamerson y Bob Babbit (bajo). Chet Forest (batería). Larry Nozero (saxo soprano). Tate Houston (saxo baritone). Angelo carlisi (saxo alto). Dayna Hartwiick y William perich (falutas). Joh Trudell y Mauurice Davis (trompetas). Carl Raetz (trombón), Jack Brokensha (campanas y percussion). Jack Ashford (pandereta y percussion). Johnny Griffith (celeste). Marvin Gaye (piano). Eddie Brown y Earl DeRouen (bongos y conga). Eli Fountain (solo de saxo alto). William “Wild Bill” Moore (solo saxo tenor). Gordon Staples, Zinovi Bistrizky, Beatriz Budinszky, Richard Margitza, Virginia Halfmann, Felix Resnick, Alvin Scoore, Lillian Doowns yJames Waring (violins). Edouard Kesner, Meyer Shapiro, David Ireland y Nathan Gordon (cellos). Carole Crosby (arpa). Max Janowsky (bajo de cuerda).

Otras portadas: Let’ s get it on (1973), I want you (1976) , At the London Palladium (1977) , Here, my dear (1978) e In our lifetime (1981).

01 diciembre 2005

“Houses of the holy” (Atlantic). Quinto disco de Led Zeppelin, una de las bandas de rock duro más famosas de los setenta, que en esta grabación abandona el blues rock de sus comienzos para adentrarse en otros estilos (reggae) y apoyarse en instrumentos hasta entonces poco utilizados por el cuarteto, como el piano, melotrón y órgano, que toca el bajista John Paul Jones. También tiene un importante protagonismo la utilización de la guitarra acústica en buena parte del repertorio de “Houses of the holy”. La portada fue el resultado de un costoso montaje fotográfico de tipo fantástico, de acuerdo con el argumento de una novela de ciencia ficción, y según los gustos de Robert Plant y Jimmy Page, que realizó el equipo de Hipgnosis, un reputado colectivo de artistas conocido por sus excelentes carátulas de discos para las superbandas de los años setenta. De los Zeppelín estaba siempre al tanto de sus discos, sobre todo desde que escuché por primera vez la canción “Whole lotta love” por recomendación de Josechu Roca, un vasco noble de elegante regate con el balón al estilo del fútbol inglés que triunfaba en Europa desde la segunda mitad de los sesenta, con quien pasé muchas horas con música de fondo de todos los estilos musicales y en los lugares más inverosímiles. De “Houses of the holy”, considerado por una parte de la crítica como una concesión del grupo a la comercialidad, me gusta en especial “Over hills and far away”, pieza que grabé en un primitivo aparato de cinta magnética durante el verano de 1973 y me sirvió para levantar el ánimo durante mi estancia en tierras gallegas, donde además para pasar el tiempo, tras el relajante baño en las limpias aguas del Sil, leía “Derniers vers”, de Rimbaud, o “Queixumes dos pinos”, de Pondal.

Canciones: “The song remains the same”, “The rain song”, “Over the hills and far away”, “The crunge”, “Dancing days”, “D’ yer mak’er”, “No quarter” y “The ocean”.

Músicos: Robert Plant (voz), Jimmy Page (guitarras), John Paul Jones (bajo y teclados) y John Bonham (batería).

Otras portadas: Led Zeppelin I (1968), II (1969), III (1970), IV (1971) y Physical Graffiti (1975).
"Okie" (Shelter-Mediterráneo). Tercer disco de J.J. Cale (Tulsa, Oklahoma, 1938) que en la portada realiza un homenaje, de la mano de Richard Germinario, a sus paisanos los “okies” (personajes entre vagabundos y desempleados en busca de mejor vida durante los años posteriores a la depresión de 1929 ). El guitarrista y compositor mantiene en “Okie” su estilo artesano hasta el punto de que algunas canciones fueron grabadas en su casa. De las recogidas en el estudio hay que destacar “I got same the blues”, que recuperó para su repertorio en directo el grupo sureño “Lynyrd Skynyrd”. Esto es un ejemplo más de que J.J. Cale, a pesar de su alejamiento del mundo de la farándula musical, se ganó el respeto de muchos roqueros, entre ellos Eric Clapton que grabó varias de composiciones: “After midnight” y “Cocaine”, entre las más conocidas a nivel comercial. J.J. Cale también influyó en otros músicos ingleses, entre otros, Mark Knopler, quien en su primer disco con Dire Stratis demostraba que había escuchado con atención al compositor, cantante y guitarrista de Tulsa, que durante algún tiempo fue músico de estudio.

Canciones: “Crying”, “I’ ll be there (if you ever want me)”, “Starbound”, “Rock and roll records”, “The old man and me”, “Everlovin’ woman”, “Cajun moon”, “I’ d like to love you baby”, “Anyway the wind blows”, “Precious memories”, “Okie” y “I got the same old blues”.

Músicos: J.J. Cale (bajo, batería, guitarra, slide guitar y voz), Beige Adair (teclados), Harold Bradley (guitarra y guitarra rítmica), Kenny Malone (batería), Grady Martín (guitarras), Farell Morris (batería, percusión, vibráfono y voces), Weldon Myrick (steel guitar), Tommy Cogbill (bajo), Beige Cruzer (teclados), Paul Davis (guitarra), Tim Drummond (bajo y batería), Mac Gayden (guitarra), Dennis Good (trombón), Joel Green (bajo), Karl Himmel (batería), Mike Leech (bajo), Terry Perkins (batería), Billy Pret (saxofón), Hargus “Pig” Robbins (teclados y piano), Jerry Smith (teclados y piano), Red Spivey (teclados y piano), George Tidwell (trompeta), Jerry Whitehurst (teclados y piano) y Reggie Young (guitarras).

Otras portadas: Naturally (1972), Really (1973), 5 (1975), Troubadour (1976, Shades (1981) y Travel log (1990).
“Sticky fingers” (Emi-Odeon). Primer disco de The Rolling Stones en Emi-Odeon con el inconfundible logotipo de labios y lengua rojos. La portada de esta grabación fue realizada por el artista norteamericano Andy Warhol (antes había diseñado la portada de la primera grabación de la formación afincada en New York, The Velvet Underground). Warhol se lució en la carátula porque ofrecía la fotografía de un blue jeans a la altura de la bragueta, esta última incluía una cremallera de verdad, mientras que en el interior la funda del disco recogía la imagen de un calzoncillo y de su portador de cintura abajo, bastante dotado en cuanto a miembro viril. Esta obra de Andy no gustó a las autoridades españolas, que, otra vez, recurrieron a la censura, por lo que hubo que cambiar la carátula. En su lugar se utilizó una imagen que está más relacionada con el título del disco, “Sticky fingers”, que traducido al español significa dedos pegajosos o pringosos, más o menos. El encargado del diseño fue John Pásche y el autor de la fotografía pringosa, Phil Jude. En fin que la portada no tenía desperdicio y causó tanto impacto como la de Warhol, pero sólo se editó en España, con lo cual se convirtió en una pieza para coleccionistas. En el ámbito musical, la nueva etapa de The Rolling Stones demuestra la perfecta integración de Taylor, más blusero que roquero, tras haber girado a finales de 1969 por Estados Unidos, el año del estrepitoso fracaso del festival de Altamont, donde The Rollings Stones tuvieron más suerte que algunos músicos y espectadores, agredidos por los ángeles del infierno que llegaron a matar a un joven que les había amenazado con una pistola simulada. De esta historia, aparte de los cientos de artículos editados en revistas musicales, hay una película que no tiene desperdicio, porque también aparecen otros grupos además de sus satánicas majestades. A pesar de todo, de aquella gira salió uno de los mejores discos en directo de los británicos, que en su nueva etapa, iniciada con Sticky fingers, ofrecían excelentes composiciones donde de nuevo se imponía a nivel de composición el tandem, Jagger-Richards, con piezas inolvidables como Brown sugar, Wild horses, Dead flowers, Can´t you hear me knocking o I got the blues. Estas piezas ofrecían influencias variadas, entre ellas las del entonces en auge country rock, en el que Richards había sido introducido en Estados Unidos por su colega Gram Parsons (ex byrd y ex flyng burrito). En el original no censurado, había una canción de Marianne Faithfull, “Sister morphine”, que era sustituida en el vinilo español por Let it rock. Como era habitual, el grupo británico tuvo a su disposición a otros músicos, algunos habituales en las grabaciones de los Stones, entre otros I. Stewart, Nicky Hopkins, Bobby Keys y Billy Preston. Hasta Ry Cooder tocaba la guitarra en este disco esencial en la larga carrera de los Stones. Cuando ya había escuchado por la radio decenas de veces "Brown sugar", allá por 1971 mi amigo Moli me informaba de que los Rolling habían sacado un larga duración con una portada muy llamativa, ante lo cual no dudé en visitar las tiendas en busca de tan novedoso producto. El resultado de esa expedición fue el encuentro con un disco que sigo escuchando a menudo, y del que siempre me ha gustado “Sway”. Como también aprecio la contraportada con esa inolvidable fotografía de unos irreverentes y aún jóvenes “balas perdidas”.

Canciones: “Brown sugar”, “Sway”, “Wild horses”, “Can’ t you here me knoking”, “You gotta move”, “Bitch”, “I got the blues”, “Let it rock”, “Dead flowers” y “Moonligth mile”.

Músicos: Mick Jagger (voz, percusión y guitarra), Keith Richards (guitarras y voz), Mick Taylor (guitarra), Bill Wyman (bajo y piano eléctrico), Charlie Watts (batería), Iam Stewart (piano), Bob Keyes (saxo), P. Buckmaster (cuerdas), Nicky Hopkins (piano), Jim Dickinson (piano), Rocky Dijon (congas), J. Price (trompeta), Billy Preston (órgano), Ry Cooder (guitarra) y Jack Nitzche (piano).

Otras portadas: Big hits (high tide and green grass) (1966), Between the buttons (1967), Let it bleed (1969), Get yer ya-ya out! (1970), Exile on Main ST. (1972), It’ s only rock ‘n roll (1974), Made in the sade (1975) y Undercover (1983).