19 diciembre 2006

“Indigo girls” (Epic). Emily Saliers y Amy Ray se dieron a conocer musicalmente bajo el nombre de “Indigo girls” a mediados de la década de los ochenta, pero será a partir de 1989 cuando irrumpan con fuerza en el panorama musical del nuevo folk-rock de la citada década en Estados Unidos, donde sonaban con fuerza Suzanne Vega, Michelle Shocked, Lucinda Williams, 10.000 Maniacs (con Natalie Merchant) y Tracey Chapman, entre otras cantantes, dentro del citado estilo con predominio de guitarras acústicas, pero también con presencia de instrumentos eléctricos propios de las bandas de rock. El dúo dispuso en su segundo elepé de la colaboración de un variado plantel de músicos, algunos de Hothouse Flowers y REM, que aportaron la vitalidad presente en piezas como “Closer to fine”, “Traed to Be True”, “Love’ s Recovery” o “History of Us”, composiciones centradas en la reflexión sobre diferentes aspectos de la vida cotidiana y el compromiso con diferentes causas. La carátula del disco presenta una fotografía del dúo captada por Lena Bertucci.

Canciones: “Closer to Fine”, “Secure Yourself”, “Kid Fears”, “Prince of Darkness”, “Blood and Fire”, “Tried to Be True”, “Love’s Recovery”, “Land of Canaan”, “Center Stage” e “History of Us”.

Músicos: Emily Saliers (guitarras acústicas y eléctricas de 6 y 12 cuerdas, palmas y voz), Amy Ray (guitarra acústica, palmas y voz), John Keane (bajo, guitarras acústicas y eléctricas de 6 y 12 cuerdas, guitarra slide, shaker y batería), Liam Maonlai (batería, órgano Hammond, bodhram y voz), Mike Mills (bajo), Fiachna O’Braondin (gaita y voz), Peter O’Toole (mandolina y voz), Bill Berry (batería), Peter Buck (guitarra eléctrica), Paulinho Da Costa (percusión), Jay Dee Daugherty (batería), Kasim Sulton (bajo), John Van Tongeren (teclados), De De Vogt (bajo), Jai Winding (piano), Luka Bloom (voz) y Michael Stipe Vocals (voz).

Otras portadas: Strange Fire (1987) y Nomads Indians Saints (1990).
“El patio” (Movieplay). En Sevilla, con el nombre de la zona más popular de esta ciudad andaluza, nace el trío Triana, una de las formaciones indispensables en el desarrollo del rock hispano de la segunda mitad de los setenta, que se presentaba escuetamente en su primer elepé: “Ya teníamos ganas de hacer un LP. Por fin hemos conseguido reunir una serie de ideas, unos cuantos amigos y lo hemos realizado”. El disco en un primer momento no tendrá suficiente difusión, pero dos años después llegará a convertirse en superventas. Los integrantes del trío ya habían participado en diferentes bandas de rock y pop, en algunos casos relacionadas con la música progresiva que en Sevilla tenía un importante vivero de instrumentistas, cantantes y compositores, quienes desarrollaban su actividad con mayor o menor aceptación desde mediados de los sesenta. Triana se amolda al rock sinfónico de bandas como King Crimson o Emerson, Lake and Palmer, pero introduciendo el flamenco, como se puede apreciar en las siete canciones de “El patio”, la mayoría de largo desarrollo. Canciones de amor y mensajes de paz se mezclan con guitarras eléctricas y flamencas, con teclados y batería, una fusión que tuvo éxito y convirtió a este disco en uno de los referentes del rock hispano de los setenta. Quedan como sus piezas más escuchadas: “Abre la puerta”, “Sé de un lugar”, “Luminosa mañana” y “En el lago”. La portada del disco fue realizada por el artista andaluz Máximo Moreno.

Canciones: “Abre la puerta”, “Sé de un lugar”, “Todo es de color”, “Luminosa mañana”, “Diálogo”, “En el lago” y “Recuerdos de una noche”.

Músicos: Jesús de la Rosa (teclados y voz), Eduardo Rodríguez (guitarra flamenca), Juan José “Tele” Palacios (batería y accesorios de percusión), Antonio Pérez (guitarra eléctrica) y Manolo Rosa (bajo).

Otras portadas: Hijos del agobio (1977), Sombra y luz (1979), Un encuentro (1980), Triana (1981) y Llegó el día (1983).