La música, con letra entra

En aquel tiempo algo estaba ocurriendo al otro lado del Atlántico, en concreto en Norteamérica, donde jóvenes blanco copian descaradamente la música y el baile de los negros. En las facultades de las principales ciudades españolas comienzan a aparecer grupos de no más de cinco componentes que se apuntan al rock and roll y sus derivados, mientras que las orquestas de baile intentan ponerse al día. Entre los pioneros están Los Estudiantes, Los Pekenikes y Los Pájaros Locos, Kurt Savoy y el Dúo Dinámico. Estas primeras formaciones tendrían continuidad en la década siguiente con cientos de grupos tocando en los más apartados rincones del territorio nacional.

Al fenómeno roquero, luego llamado yeyé, se sumarían importantes figuras de la radio y de la naciente televisión, donde no faltaron espacios musicales para la juventud, Alta Fidelidad y Escala en Hifi, donde actores de ambos sexos hacían imitaciones en playback de los principales éxitos del momento, muchos de ellos convenientemente traducidos al español del entonces revolucuionario repertorio de grupos británicos: The Beatles, Rolling Stones, Kinks o The Who, los pesos pesados de la invasión musical inglesa. Los primeros actuaron en la plaza de toros de las Ventas en Madrid.