Full de damas
Billie Holiday (1915-1959) y Anita O' Day (1919-2006) aparecen en este post con algunas de sus mejores cartas de presentación que les sirvieron a ambas para labrarse el reconocimiento por parte de crítica y público como dos auténticas y versátiles cantantes de jazz, cuyas obras saltaron por encima de modas, vidas rotas, crisis, drogas y racismo.
Así sobre la mesa queda desplegada esta jugada que apuesta por llegar a todas las sensibilidades con la convicción de no defraudar.
Ambas estadounidenses, una negra de Filadelfia, otra blanca de Chicago, conocieron los tugurios de mala muerte donde empezaron desde muy jóvenes a cantar, como también descubrieron la magia de poder grabar un disco o de formar parte de algunas de las tantas orquestas que recorrían Estados Unidos y con las que también llegaron a los más selectos auditorios.
Pero, lo dicho, quedan sus canciones, unas más inspiradas, las más, otras menos, que no pasan desapercibidas a las más variopintas personalidades amantes de la música.
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