Cara Tula: Novedades

10 septiembre 2025

Novedades

Cutthroat (Dead Oceans) 2025

Shame

Portada: Louise Edison

Edición: 5 de septiembre

Shame (Londres, Inglaterra, Reino Unido)

Post-punk, rock, alternativo e independiente.

E sello Dead Oceans anuncia el cuarto disco del grupo Shame: “Cutthroat es un paseo de placer. Es para el conductor inexperto. El que quiere ir rápido sin ninguna razón más que la diversión. Está impulsado por el hambre. Hambre de algo mejor. Por algo que te han dicho que no mereces. Es primario. Es crudo. No se disculpa. Es la persona que se presenta a la fiesta sin invitación. Porque cuando te han empujado hacia abajo, no hay ningún lugar a donde ir más que hacia arriba. Cuando no tienes nada, no tienes nada que perder. -Vergüenza. Cutthroat es la vergüenza en su mejor momento. <Se trata de los cobardes, los cabrones, los hipócritas>, dice el vocalista Charlie Steen. <Seamos realistas, hay muchos de ellos en este momento>".

La discográfica también considera a Cutthroa: "tUn nuevo álbum sin complejos con el productor ganador del Grammy John Congleton al mando; está tuneado y sobrealimentado. Es exactamente donde quieres que esté la vergüenza. Aún en sus veintes, los cinco amigos de la infancia —Charlie Steen, los guitarristas Sean Coyle-Smith y Eddie Green, el bajista Josh Finerty y el baterista Charlie Forbes— han desarrollado Shame de forma exponencial, con ambiciosas ideas sonoras y la destreza técnica para ejecutarlas. Tras demostrar su valía en repetidas ocasiones con legendarios conciertos y tres álbumes aclamados por la crítica, Shame llegó a Cutthroat listos para crear una nueva Zona Cero".

"Se trata de quiénes somos", dice Steen. "Nuestros conciertos no son arte escénico; son directos, confrontativos y crudos. Esa siempre ha sido nuestra esencia. Vivimos en tiempos locos. Pero no se trata de <Pobre de mí>. Se trata de <que te jodan>".

"Crucial para esta nueva perspectiva incendiaria fue el productor John Congleton (St. Vincent, Angel Olsen). Desde su reunión inicial, el enfoque directo de Congleton se convirtió en una fuerza guía para optimizar las ideas de la banda", según la nota oficial que añade: "Impregnado del característico sentido del humor de Shaylah, el álbum aborda los grandes problemas actuales y juega con ellos con alegría. Con Trump en la Casa Blanca y Shaylah encerrada en Salvation Studios en Brighton, lanzan una mirada implacable a temas de conflicto y corrupción; hambre y deseo; lujuria, envidia y la omnipresente sombra de la cobardía".

En relación con el repertorio se tiene en cuenta que "musicalmente, el disco también juega con nuevas ideas viscerales. Al hacer música electrónica de gira por diversión, Coyle-Smith ya había visto los loops que creaba como una entidad separada de lo que escribía para Shaylah. Entonces, se dio cuenta de que tal vez no tenían por qué serlo. "Esta vez, todo podía valer si sonaba bien y acertabas", dice.

"El primer sencillo y canción principal de Cutthroat toma esta idea y la desarrolla en, posiblemente, la mejor canción que Shaylah haya grabado jamás. Es una bola de actitud apenas contenida en tres minutos de hedonismo indie en la pista de baile. También introduce magistralmente la perspectiva lírica del disco: una en la que la arrogancia y la profunda inseguridad son dos caras de la misma moneda", recuerda el comunicado.

“Leía muchas obras de Oscar Wilde donde todo giraba en torno a la paradoja”, explica Steen. “En 'Cutthroat', se refleja esa idea de El abanico de Lady Windermere: 'La vida es demasiado importante para tomársela en serio'”.

“Spartak se desenvuelve con un ritmo country con toques americanos. Básicamente, intentaba escribir una canción de Wilco”, dice Coyle-Smith entre risas). Esta canción encierra uno de los temas principales del disco: criticar las camarillas y la mentalidad de grupo. Pone el punto de mira en los arribistas; la gente de la fiesta que siempre te mira por encima del hombro intentando encontrar a alguien más importante". “Supongo que este desprecio hacia las camarillas viene de lo mal que me hicieron sentir los chicos populares de mi infancia”. apunta Steen: “Era un adolescente regordete al que le gustaba la música equivocada y vestía mal”.

“Es solo otro momento en el que me gustaría decirles que se jodan a esa gente, y a cualquiera que haga sentir mal a alguien por no encajar”. Steen dice con una sonrisa en su rostro. El tema destacado del álbum, Quiet Life, la primera chispa en el proceso de composición de Cutthroat, se entrega a través de un riff rockabilly áspero, influenciado por el tono y la actitud de bandas como The Gun Club y The Cramps".

"'Quiet Life' trata sobre alguien en una relación de mierda. Trata sobre el juicio que recibe y la lucha que tiene que atravesar, tratando de comprender el conflicto que enfrenta, de querer una vida mejor... pero estancado". Lampião llega a donde la vergüenza nunca antes había llegado, mientras Steen canta en portugués sobre el polémico bandido brasileño: un héroe para algunos, un asesino para otros. Mi novia es brasileña y estuve en São Paulo con sus padres", indica Steen. Su madre me habló de un famoso bandido, Lampião, y su esposa, Maria Bonita. Son como Bonnie y Clyde allá, igual de famosos. Me parecía una locura que nadie en Londres supiera quiénes eran, así que quise escribir una especie de canción popular sobre ellos, condensando su historia. La canción que canto en el coro la compuso uno de los bandidos de la banda de Lampião, Volta Seca".

"After Party" refuerza la entrega estridente de Steen con sintetizadores inquietantes y trémulos que luego estallan en un estribillo irónicamente alegre antes de que el cierre, "Axis of Evil", lleve la vergüenza a una dimensión completamente nueva y emocionante. Canalizando la electrónica merodeadora y vigorosa de Depeche Mode, es algo que la banda no ha hecho antes. Esta descarada autoconciencia también es importante. Por mucho que la vergüenza quiera reventar las burbujas de la fanfarronería y el ego, animándonos a mirarnos al espejo y preguntarnos: "¿Quién tira la primera piedra…?", también entienden que, en el fondo, la vida a menudo es ridícula", sigue la descripción de Steen recogida por Dead Oceans.

“Nunca sabes cuándo te vas a ir, así que aprovecha mientras estés aquí”, dice Steen encogiéndose de hombros. Cualquier buen católico como yo podría haberse quedado dormido cada noche con un Jesús crucificado en la pared. Quizás eso también tenga algo que ver…”

"El resultado es un álbum que se deleita en las idiosincrasias de la vida, levantando una ceja y planteando las preguntas desagradables que tan a menudo se pasan por alto con tacto", concreta el comunicado, mientras que, por su parte, Steen avisa: “No estoy aquí para responder preguntas, soy un idiota de 27 años…”, advierte Steen con una risita discreta. Pero la única respuesta que Cutthroat da con un floreo rotundo es que, ahora mismo, la vergüenza nunca ha sonado mejor".